sábado, 17 de enero de 2009

Los abusos de la memoria


Caer en incongruencias en un momento dado, ¿no nos ha ocurrido alguna vez? Sentirnos incomprendidos ¿cuántas veces? ¿Pero nos hemos creído incomprendidos por no ver saciado un vicio llamado clarividencia?No la Clarividencia, pues, ¿quién la posee? ¿Crees en un Dios que posee esa Clarividencia? Me parece bien, pero ¿ es un Dios Clarividente que te ha señalado a ti, sólo a ti, como al elegido?


Rescato una lectura del año 2000: Los abusos de la memoria / Tzvetan Todorov . La leí entonces de un tirón, confortablemente sentado en un sofá de una biblioteca pública. (*)

Me alegra que se publique ahora tanto la obra de Tzvetan Todorov al castellano, aunque sea porque le han concedido un galardón.


¿Tenemos tantas carencias que nos deben poner delante de los ojos lo que aún viendo, no miramos? No tendremos la facultad de adivinar hechos futuros u ocurridos en otros lugares, no solemos ser videntes, pero sí tenemos en general, creo yo, la perspicacia suficiente como para penetrar en el futuro y aventurar que lo que va mal, puede ir todavía peor, mientras se siga abusando (haciendo mal uso), de la memoria.


Ya en los 90, Tzvetan Todorov alerta al mundo del peligroso uso inadecuado de la memoria, que puede acarrear consecuencias nefastas. Repetir comportamientos que ya en su día generaron dolor. Recurre a la Historia para fundamentar su tesis. Extrae el ejemplo israelí: "El recuerdo de que en el pasado fueron víctimas les impide darse cuenta hoy de que actúan como verdugos".

En el caso concreto del enfrentamiento entre árabes e israelíes, Todorov, detecta un grave obstáculo para alcanzar la paz: "La falta de valentía", afirma.De Ehud Olmert, en una entrevista concedida poco después de que transcendiera su dimisión como primer ministro israelí, Todorov dice: "De sus declaraciones podía deducirse una opinión favorable al reconocimiento de los derechos del pueblo palestino; sólo que sus palabras llegaban justo cuando se iba". Es decir, tarde. Cuando ya no ostenta el cargo desde el que es más fácil cambiar las cosas.

Sobre la memoria, también lamenta que, en muchas ocasiones, sea precisamente ella la que propicie "el levantamiento de un muro entre los malhechores de un determinado acontecimiento histórico y nosotros". Sus acciones, por viles, nos resultan ajenas, y "esta postura inflexible impide que adoptemos conclusiones que nos puedan ser de alguna utilidad" de cara a la resolución de un conflicto.


Habla de “Memoria constructiva”

En su opinión, "son sólo algunos modos de ejercitar la memoria los que llevan aparejadas consecuencias positivas". Pone más ejemplos, como el genocidio de Camboya y el apartheid de Sudáfrica. Dos capítulos traumáticos de los que sí se ha conseguido extraer conclusiones válidas sobre las que asentar una convivencia pacífica.

La memoria, esta vez sí, ha actuado para conjurar el mal. Intenta, desde hace mucho dejar claro que con la memoria hay que andarse con mucho tiento.

Más recientemente leí en una entrevista sus impresiones sobre la delicada situación que atraviesa la economía mundial. En realidad, más que una impresión, apunta un deseo: "Espero que la crisis deje claro que los ultraliberales son un peligro y que la expansión económica, por sí misma, no es un objetivo sino un medio". "Un medio", remacha Todorov, "para alcanzar el bienestar común".


En su último libro publicado en España por Galaxia Gutenberg, El miedo a los bárbaros, formula la paradoja que encierra: "El miedo a los bárbaros nos puede convertir en bárbaros ( … ) Al exagerar la fuerza de una amenaza exterior nos dañamos a nosotros mismos".


Título: Los abusos de la memoria / Tzvetan Todorov ; [traducción de Miguel Salazar]

Editorial: Barcelona : Paidós, [2000]

Descripción física: 61 p. ; 17 cm

Colección: (Paidós Asterisco)

ISBN: 84-493-0814-3

Materias: Totalitarismo.


(*)Un tesoro que hay que guardar.


1 comentario:

Empe dijo...

Es triste la verdad, y, a veces, sí tiene remedio (lo siento Serrat...). La memoria, en el caso que nos ocupa, o, mejor dicho la carencia de ésta, resulta ser un recurso de fácil aplicación ante los intereses mercantilistas de los "poderosos" del mundo. Qué pena. Nos estamos deshumanizando y si perdemos la memoria... ¿qué devendrá?
Gracias por tu comentario.